¿Cómo saber si haces un buen manejo de tu dinero?
Es posible que te preguntes cómo puedes determinar si estás haciendo un buen manejo de tu dinero. Aunque no hay una regla universal para responder tu duda, sí existen algunos indicadores de desempeño que puedes aplicar. Con ellos, podrás averiguar si tu manejo en algunos aspectos coincide con las recomendaciones de los expertos.
¿Qué indica un buen manejo de tu dinero?
Hay una serie de criterios que permiten determinar cuando estás haciendo un buen manejo de tu dinero. Funcionan como una especie de indicadores de que tus finanzas están bien administradas, y tienes capacidad de ahorro e inversión.
Claro está que estos criterios no aplican en situaciones particulares de la vida, por ejemplo, cuando estás atendiendo una emergencia. O cuando estás invirtiendo en un emprendimiento particular propio o de un tercero, o adquiriendo un bien inmueble.
Los tres principales indicadores que debes aplicar, para determinar si haces un buen manejo de tu dinero son:
1.- Tasa de ahorro personal
La tasa de ahorro personal es la parte o fracción de tus ingresos brutos que dedicas al ahorro. Los expertos coinciden en señalar que una tasa de ahorro adecuada se coloca entre el 5% y 10%.
Si logras estar en ese rango, significa que podrás afrontar el futuro y los imprevistos con mayor disponibilidad de dinero.
2.- Tasa de endeudamiento
La tasa de endeudamiento es la proporción de tus ingresos netos mensuales que dedicas al pago de tus préstamos. Los ingresos netos se obtienen restando a la totalidad de ingresos, los gastos fijos que incurres mes a mes. La única deuda que puedes considerar en estos gastos es la correspondiente al crédito hipotecario.
Los versados en economía personal señalan que la tasa de endeudamiento no debe superar al 35%. De esta forma, no sobrecargas tus finanzas en el pago de deudas y evitarás caer en morosidad.
3.- Porcentaje de gastos improductivos
Un gasto improductivo es aquel que no se emplea para generar una oportunidad de ingreso; o sea, es un derroche. Si compras una computadora para mejorar el rendimiento de tu trabajo, estás haciendo un gasto productivo. Si usas tu tarjeta de crédito para cancelar una cena de cumpleaños, realizas un gasto improductivo.
La relación entre gastos improductivos y los gastos totales no debe superar al 15%, para evitar el derroche.