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¿ Por qué no puedo ahorrar ?

Cuando el por qué no puedo ahorrar es la pregunta más difícil Muchas personas conocen la importancia del ahorro, y...

Cuando el por qué no puedo ahorrar es la pregunta más difícil

Muchas personas conocen la importancia del ahorro, y quizás comienzan a guardar cierta cantidad de dinero al mes, o semanal, de acuerdo a la fecha que perciben sus ingresos, pero se presentan emergencias, y lo primero que sacan es el ahorro.

Luego vuelven a comenzar de nuevo a generar el ahorro, pero nuevamente les sucede lo mismo, y se convierte en un círculo. Después de un tiempo se dan cuenta lo difícil que es ahorrar y se excusan de que el pago de hipotecas o créditos no se los permite.

Entonces, surgen interrogantes cómo está ¿porque no puedo ahorrar? O, ¿por qué es tan difícil ahorrar dinero?.

El ahorro, es un hábito, más allá de una obligación. Cuando nos determinamos a hacerlo, olvidando lo que estamos guardando, fácilmente nos familiarizaremos con esta manera tan fácil pero al mismo tiempo tan complicada para otros.

El ahorro debe ser un estilo de vida. No todo lo podemos gastar. Hay que trabajar pensando en el futuro y no solo en el presente. Trabajar por metas, sueños y proyectos. Muchas veces el ahorro puede servir para una futura inversión hasta para pagar créditos o hipotecas de una casa.

Allí el ahorro toma más sentido de propósito para multiplicarse y ver materializado los sueños.

Si no puedes ahorrar, crea un presupuesto y trabaja en base a porcentajes, por ejemplo, apartar el 5% de mis ingresos para ahorrar. 

También la manera como vas a ahorrar es importante, no debajo de un colchón, o en un calcetín. Abre una cuenta de ahorro donde puedas ganar intereses por el dinero allí depositado.

Trabaja con metas, se planificado y ordenado con tus finanzas, capacítate y prepárate para el futuro. Invierte tiempo en cursos de preparación financiera. Y trabaja por ser mejor.

¿Como puedo empezar a ahorrar?

Gastando menos, y guardando más. El consumismo extremo es enemigo del ahorro.

Antes de gastar pregúntate si de verdad necesitas lo que piensas comprar.

Aparte un porcentaje mensual de tus ingresos y destinarlos en una cuenta especial para ahorrar.

Si estás en un crédito hipotecario de tu casa, pagá tu cuota primeramente.



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