Los 4 tipos de ahorro que existen
Existen diversos tipos de ahorro en el mundo financiero, cada uno con características diferentes que se atribuyen a determinado grupo o finalidad. Es importante saber esto para poder entender mejor el funcionamiento del país e incluso tu situación a nivel personal.
Por supuesto, para comprender totalmente cada uno hay que saber qué son los ahorros y qué implican. Por lo tanto, vamos a definir este vital concepto para proceder a indagar sobre sus tipos existentes y cómo influyen en la vida de los ciudadanos.
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¿Qué son los ahorros y por qué hay tipos de ahorro?
El dinero que queda intacto de tus ingresos, ya sean personales o empresariales, sin que se destine para la cobertura de ciertos servicios o compras, se denominan ahorros. Por lo tanto, se podría decir que este término hace referencia a aquella porción de dinero que se conversa para el futuro.
Vale destacar que los ahorros solo serán posibles de adquirir mientras los ingresos obtenidos sean superiores a los gastos efectuados. Esto sin importar la moneda en que decidas hacerlo, ya sea en soles u otra denominación extranjera.
Los ahorros son parte importante del buen futuro de una persona, ya que su conservación ayuda a tener dinero disponible para conseguir independencia económica o cubrir alguna necesidad que llegue a presentar a posteriores.
Sin embargo, no solo aplica para individuos y esto lo demuestra los diferentes tipos de ahorro existentes.
4 tipos de ahorro principales
Al entrar en el mundo financiero usualmente nos encontramos diversos tipos de elementos y es importante conocerlos para comprender el mecanismo de este ámbito.
Mientras que al tratarse de los ahorros más allá de esto, es necesario conocerlos para comprender a mayor profundidad diversas áreas y por eso te vamos a contar un poco sobre los tipos de ahorro más utilizados por los expertos.
Ahorro financiero
En este caso hace referencia a la adquisición de activos financieros que son entregados por gobiernos o entidades bancarias. Algunos de los ahorros financieros son los bonos, depósitos, títulos y certificados.
Este tipo de ahorro es de gran utilidad para diversas personas, familias y compañías que quieran asegurar su futuro o tener algún beneficio previsto para la cobertura de una necesidad que por sí solos se les dificulta afrontar.
Ahorro público
Se trata de la diferencia que se presenta entre los ingresos y gastos realizados por el gobierno. En este caso la actividad es ejercida por el Estado mediante los organismos públicos, una acción que hace directa o indirectamente.
Veamos esto a detalle. Primero, el Estado recibe fondos mediante diversos medios. Posteriormente, debe proceder a gastar parte del dinero en diferentes servicios como prestaciones, pagos de infraestructuras, entre otros.
Una vez que esto se hace, se evalúa la diferencia restante entre los ingresos obtenidos y los gastos generados. Cuando esta es positiva, es decir que el primero es mayor al segundo, se presenta el ahorro público que se denomina en el mundo económico como superávit fiscal.
Pero, cuando el resultado es justo lo contrario, entonces se trata de un déficit fiscal. Y si bien se piensa que la existencia del ahorro público es un buen reflejo de la gestión gubernamental no necesariamente es así, ya que, por ejemplo, a veces solo implica la poca inversión en planes públicos.
¿PUEDO TENER DOS CUENTAS DE AHORRO EN EL MISMO BANCO?
Ahorro macroeconómico
A grandes rasgos, este es uno de los tipos de ahorro que se enfocan en las diferencias que existen entre los ingresos y consumo, solo que se aplica en lo referente a una gran economía.
Debido a ello, el ahorro macroeconómico es de utilidad para conocer y evaluar la capacidad de ahorro que tiene determinada zona, desde un país hasta una ciudad.
Ahorro privado
Similar al tipo público, hace referencia a los ingresos y consumo, específicamente de sus diferencias. De esa manera, este ahorro permite conocer la cantidad de dinero reservado, al indagar sobre los gastos efectuados y comparar.
Este surge a partir de las decisiones de gastos tomadas por las entidades pertinentes, según la renta disponible. Dentro de esta categoría se pueden encontrar individuos corrientes, instituciones sin ánimo de lucro y empresas. El ahorro privado sumado al público se considera como el ahorro total de un país.
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