¿Piensas retirar efectivo con tarjeta de crédito?
Uno de los errores más comunes que comete la gente al utilizar una tarjeta de crédito es suponer que puede retirar dinero en efectivo como si fuera una tarjeta de débito.
Se trata de un gran error, ya que hay una diferencia importante entre ambos productos: con la tarjeta de débito se gasta el propio efectivo (cuenta de ahorros), pero con la tarjeta de crédito se toma dinero prestado y hay que devolverlo con altos intereses.
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La retirada de efectivo de una tarjeta de crédito es un servicio que ofrecen los bancos y que puede utilizarse en cualquier situación. Este préstamo se emite contra su línea de crédito, y los intereses que se obtienen son increíblemente grandes; sin embargo, muchas personas no son conscientes de lo que implica esta práctica, y más tarde se convierte en un dolor.
Razones para no retirar efectivo con su tarjeta de crédito
Si tienes tarjetas de crédito, debes utilizarlas con prudencia para evitar endeudarte. Uno de los primeros principios que debes seguir es evitar retirar dinero en efectivo, ya que esto podría costarle dinero extra y llevarlo a problemas de endeudamiento.
- Para empezar, tener efectivo en la práctica es “comprar efectivo“. A causa de los intereses y las comisiones, el dinero que utilices te costará más cuando lo devuelvas.
- El tipo de interés por sacar dinero en efectivo de tu tarjeta de crédito es bastante alto. ¿Qué tanto? Pueden llegar a duplicar los intereses de las compras.
- Cuanto más espere para devolver los fondos, mayor será el tipo de interés.
- ¿Por qué debo devolver el dinero que tengo disponible a largo plazo? Porque la mayoría de los bancos cobran intereses diariamente.
- Algunas tarjetas de crédito también imponen una tasa o comisión por la retirada de efectivo, que se suma al importe de los intereses que debe pagar.
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¿En qué caso retirar y que hacer después?
El único momento en el que se debe utilizar el dinero en efectivo es en una emergencia, cuando no hay otras opciones de pago. También puede ser legítimo si, como titular de la tarjeta, está seguro de que podrá devolver el importe lo antes posible. Lo ideal es hacerlo en menos de un mes.
Recuerde que las comisiones, cargos, tasas y otras ideas relacionadas con la retirada de efectivo deben estar disponibles en las páginas web de los bancos, cajas de ahorros y empresas de financiación. Antes de retirar dinero en efectivo, considere las comisiones y decida si los gastos le disuaden o le animan a seguir adelante.
Si utiliza la tarjeta de crédito para sacar dinero, es mejor que lo pague de una sola vez para evitar el pago de intereses. Si espera un año, puede acabar pagando hasta el doble de la cantidad que retiró.
En lugar de quedar atrapado en una espiral viciosa, opte por un crédito al consumo o un préstamo personal. La razón es que tienen tipos más bajos que oscilan entre el 14% y el 15%. La diferencia es enorme.
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