4 Creencias falsas sobre el buró de crédito
Detrás del buró de crédito de nuestro país se desarrollan demasiados mitos que vale la pena desmentir. Mitos que se originaron por mexicanos que fueron perjudicados por este. Pero perjudicados en qué sentido, por ejemplo en la negación frente a un crédito hipotecario por mal comportamiento financiero. A continuación, te paso a exponer las 4 creencias falsas sobre el buró de crédito en México.
No le temas al buró de crédito, infórmate sobre este
Esta es la principal regla frente a esta temida institución. Y es que, el buró actúa de forma correcta, el problema es la poca disciplina financiera de nuestros compatriotas.
El buró, es una institución privada que entrega información a empresas afiliadas como los bancos, sobre tu historial crediticio. Por lo que, si en este momento tienes un crédito, el buró ya sabe de este. Por eso muchas personas que tienen deudas, aunque sean pequeñas, no se les acepta la solicitud de un préstamo para comprar casa, por ejemplo.
Las 4 creencias falsas sobre el buró de crédito
- El buró pertenece al gobierno
Son demasiadas las personas que creen que el gobierno es quien manipula toda tu información financiera. Pero esto es completamente falso. Como te lo mencioné en el apartado anterior, es una empresa privada.
- Es una lista negra
Otro mito falso. No solo vas a aparecer si tienes una deuda, también te encontrarás en este si has adquirido cualquier tipo de producto financiero o servicio a crédito, lo hayas pagado o no.
- Es el encargado de aprobar tus créditos
Absolutamente no. Ellos solo se encargan de entregar tu información crediticia a los bancos, pero los bancos son los que te aprueban o no el crédito hipotecario.
- Estar en el buró es no poder pedir un crédito
Con este mito ocurre todo lo contrario. Los bancos benefician a las personas que ya tienen un historial crediticio, por supuesto que esté en orden. De esta manera los bancos pueden evaluar tu perfil financiero.
Los mitos son variados, pero hoy te hemos dejado los 4 más populares. No te preocupes por el buró, más bien preocúpate por tener tus cuentas en orden.
