¿Puedes cambiar un crédito hipotecario de una caja popular o cooperativa a un banco?

Aunque en México casi nadie pide crédito en una caja municipal, popular de ahorro o cooperativa, es posible cambiarlo a...

Aunque en México casi nadie pide crédito en una caja municipal, popular de ahorro o cooperativa, es posible cambiarlo a un banco. Cambiar un crédito hipotecario de una caja popular de ahorro o cooperativa a un banco para disminuir la tasa y ahorrar dinero puede ser posible. Cada caso merece su estudio.

 

¿Tienes un crédito hipotecario con una caja o una cooperativa y te diste cuenta que la tasa de interés es alta?

Lo más seguro es que quieras mejorar el negocio de tu crédito buscando bajar la tasa para ahorrar mucho dinero. Esa es, claro, una manera apropiada de ver el negocio de la sustitución de tu crédito hipotecario :

¿Puedes cambiar un crédito hipotecario de una caja popular de ahorro o cooperativa a un banco? si, es conveniente estar pendientes de los cambios en las tasas de interés para ver la posibilidad de hacer un traspaso o compra de la deuda hipotecaria.

Pero no es la única manera de entender un buen negocio. Veamos.

 

Las cajas, cooperativas y financieras

En el sistema financiero mexicano, la gran mayoría de los créditos hipotecarios son otorgados por los bancos. Las cajas municipales y rurales de ahorro, las cooperativas de ahorro y crédito y las empresas financieras, tan importantes en nuestra economía, prestan pocas veces para compra de vivienda.  

La razón es simple.

Estas entidades prestan a tasas más altas y tienen comisiones más costosas que los bancos. Pareciera que no es un buen negocio adquirir un crédito hipotecario con ellas. Sin embargo, sí lo puede ser: las cajas, por ejemplo, son rápidas para aprobar, asumen altos riesgos, y solicitan menos documentos para aprobar las solicitudes. Si tienes un buen negocio entre manos y poca capacidad de crédito, las cajas, cooperativas de ahorro y crédito y empresas financieras son una buena opción.

Unas cosas por otras. Una buena inversión, recibir la aprobación del crédito sin mucho trámite tiene un costo.

La pregunta que sigue es,

¿Por qué las cajas y cooperativas son más costosas?

Se pueden dar ese lujo. La ley se los permite.

La ley establece todos los procedimientos que regulan la actividad financiera: quiénes pueden prestar y recibir dinero, quién regula las tasas de interés, quién vigila o cómo son los reportes de control de los bancos y entidades financieras.

En México existen más de 600 Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo (SOCAP) entre autorizadas y no autorizadas; de ellas escuchamos que unas aparecen o desaparecen, se fusionan o las absorben, están reguladas o no lo están, se expanden o quiebran, etc.; sin embargo, a pesar de que el sector de ahorro y crédito tiene 62 años en nuestro país, no ha sido sino hasta en los últimos 15 que ha crecido y se ha dado a conocer de manera importante.

Según datos recientes, 44% de adultos en nuestro país son usuarios de ahorro informal y 34% de crédito informal, siendo las primeras opciones el

ahorro en casa y pedir prestado entre familiares, respectivamente. A pesar de que las cajas de ahorro siguen figurando como una opción secundaria de ahorro y crédito entre los mexicanos, es un sector que por sus características está destinado a crecer en los próximos años.

Hay que dejar claro que en nuestro país las denominaciones: cooperativa de ahorro y préstamo, cooperativa de ahorro y crédito, caja de ahorro y caja popular se refieren a un mismo modelo económico-social, donde la gente que no tiene acceso de manera directa a otro tipo de instituciones financieras, busca resolver sus necesidades de servicios de ahorro y crédito, a través de una empresa que crea de manera conjunta la propia gente.

De esta manera, una cooperativa de ahorro y préstamo es una empresa social de propiedad conjunta, que busca entre los mismos socios dar servicios de ahorro y crédito.

Las personas que se acercan a una cooperativa o caja de ahorro buscan atender necesidades que no han podido, bajo las condiciones que les ofrece el mercado tradicional.

 



Trasladar hipoteca